Hace 3 meses retomé natación, voy a contarles a las personas que conocí:
El Shark: Competitivo. Nunca se saca el reloj porque mide el tiempo de sus rutinas. Camina erguidísimo, tiene algunos tatuajes a los costados y se depila el pecho. En la pileta siempre intenta superarte en velocidad. Si no lo logra, se estresa y te maltrata.
Pescadito: Todo le da vergüenza. Se incomoda con el silencio, pero cuando habla sólo genera más incomodidad. Se cambia la ropa interior a escondidas.
Los jubilados: Pequeño grupo de señores que nadan durante 5 minutos y luego se dedican a conversar los 40 restantes. En el vestuario viven gritando y se repiten varias veces las cosas porque no escuchan bien. Silban cuando se bañan y cuando hacen pis.
El hermoso: Alto y esbelto. Se peina durante largos minutos completamente desnudo mientras pone "All of my love" de Led Zeppelin en su celular. Siempre elige el espejo del medio, donde todos pueden verlo. No habla con nadie.
Carlos: Estuvo casado durante 26 años y se divorció hace poco. Habla mal de su ex esposa pero todavía tiene una foto con ella de fondo en el celular. Dice que no la cambia porque no sabe cómo. Su asistencia a la pileta es inconstante.
Pekinés: Es un joven muy petiso con bigote espeso. Es amable y siempre tiene buena predisposición. Está enamorado de una de las doctoras que hacen la revisación médica.
Los bañeros: No te saludan si no los saludás. Jamás sonríen a menos que seas Sirenita (otro personaje de esta historia). A veces son 5 y están todos mirando para cualquier lado menos la pileta. Tu destino en el agua les es indiferente.
Sungo: Gigante, musculoso, ágil. Su traje de baño cubre un mínimo porcentaje de piel, al punto en que, si se agacha, podés verle las entrañas. Nada a una velocidad imposible de alcanzar.
Grace: Recepcionista. Si evitás cualquier tipo de cuestionamiento o confrontación, te sonríe y te trata con amabilidad. De lo contrario, te toma por estúpido e intenta humillarte frente a los demás. Tiene voz de fumadora.
Venus: Maneja las planillas, es la supervisora de Grace. Decide quién entra y quién no. No recuerda nombres ni caras, por lo que siempre permanece imparcial. Cuando se acomoda los anteojos sabés que se viene un problemón. Es la figura de autoridad más evidente del natatorio.
Las bañeras: No te saludan si no las saludás. Jamás sonríen a menos que seas Sungo (otro personaje de esta historia). Una de ellas a veces mira la pileta. Tu destino en el agua, la mayor parte del tiempo, les es indiferente.
Team Aquagym: Grupo de mujeres que hacen aquagym. El rango etario promedio es de 60 años. Siempre se quedan charlando después de la clase durante 20 minutos al lado de la pileta. Tienen un grupo de Whatsapp. Hablan fuerte y ríen a un volumen todavía más alto.
Doctora Prisa: Te quiere sacar de encima, te hace la revisación médica en 20 segundos. Una vez entré sin tocar la puerta y bajó rápidamente la tapa de su computadora. Sólo es amable con los niños y Pekinés, que siempre se inventa una razón para hablarle.
Doctora Nervio: Siempre está tensa. Sale a fumar cada vez que puede. No te mira a los ojos ni te da indicaciones sobre cómo proceder a lo largo de la revisación. Regresó hace poco de una licencia de 4 meses. Venus le tiene prohibido cerrar la puerta del consultorio.
Sirenita: Nada rápido y tiene una rutina fija. Los bañeros se pelean por sacarle charla. A veces alguno de ellos hasta le alcanza la toalla al verla salir de la pileta. Cuando camina parece desprenderse una alfombra roja a su paso. Nadie nunca la vio de mal humor. Enemiga pública de El Shark.
Galina: Trabaja hace 15 años en la pileta. No nada, no es bañera, no es profesora, no es doctora ni tampoco administrativa. No sé qué hace, pero actúa como si fuera la dueña del natatorio. Tiene la piel bronceada, los dientes blanquísimos y el pelo lacio y largo hasta la cintura. Le saca una cabeza a todas sus compañeras. No confundir su nombre con "gallina".
Rústica: Se coma todas las "s". Hincha de Platense, posible jugadora de fútbol. Da clases dos días a la semana de la manera más estricta posible. Todas sus alumnas son mujeres. Si alguna la decepciona, se lo hace saber. Una vez salvó a una niña de ahogarse en otra pileta. En su espalda tiene tatuada la palabra "gladiator".
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